La evoluci\u00f3n de la ense\u00f1anza de la arquitectura va ligada a la teor\u00eda de la arquitectura. Debido a que el pensamiento arquitect\u00f3nico casi no se ha alterado desde la construcci\u00f3n del modernismo, a principios del siglo XX, es dif\u00edcil pedir cambios a la ense\u00f1anza, salvo de forma y actualizaci\u00f3n de informaci\u00f3n.
Por ello, se debe analizar el momento de la arquitectura actual y su ense\u00f1anza, a trav\u00e9s de la posibilidad de evoluci\u00f3n que dan los aspectos culturales.
Para comenzar, dos datos objetivos y uno emocional:<\/p>\n\n\n\n
De los 6.600 millones de seres humanos que hoy viven en el planeta(1), dos tercios \u2013es decir, 4.400 millones de personas\u2013 no tienen acceso a ning\u00fan producto formal de la arquitectura: proyecto, material, sistema industrializado, profesional, ayuda gubernamental, instalaci\u00f3n el\u00e9ctrica, Internet, etc.<\/p>\n\n\n\n
En un estudio realizado por el post\u00edtulo de asentamientos humanos de la Universidad Polit\u00e9cnica de Madrid, se descubri\u00f3 que s\u00f3lo el 10% de los arquitectos del planeta se dedica al dise\u00f1o arquitect\u00f3nico. De ellos, a su vez, solo el 10% se dedica al dise\u00f1o por encargo, es decir, el 1% del total y generalmente en los sectores m\u00e1s acomodados del planeta. Esto resulta una gran paradoja, pues gran parte de la ense\u00f1anza de arquitectura tiene la modalidad del dise\u00f1o por encargo. De hecho, es suficiente analizar la modalidad de titulaci\u00f3n de la mayor\u00eda de las universidades en el mundo, donde el proyecto arquitect\u00f3nico es un edificio. Es decir, estudian un tema que, con suerte, el 10% de ellos lograr\u00e1 aplicar en su vida profesional.<\/p>\n\n\n\n
Los dos datos anteriores producen el gran sentimiento de frustraci\u00f3n de los estudiantes de nuestras escuelas cuando salen al campo laboral y tambi\u00e9n su baja preparaci\u00f3n para enfrentar las labores profesionales reales.<\/p>\n\n\n\n
\u00bfPor qu\u00e9 est\u00e1 gran distorsi\u00f3n con la realidad? A continuaci\u00f3n, un intento de explicar este fen\u00f3meno y colaborar en las posibles alternativas de soluci\u00f3n.<\/p>\n\n\n\n
La evoluci\u00f3n del pensamiento contempor\u00e1neo a partir de la antropolog\u00eda de la cultura (fines del siglo XIX), la filosof\u00eda de la cultura (primera mitad del siglo XX), la primera globalizaci\u00f3n (segunda mitad del siglo XX) y la segunda globalizaci\u00f3n (inicios del siglo XXI), ha tenido s\u00f3lo tibios intentos de hacer un correlato con la teor\u00eda de la arquitectura.<\/p>\n\n\n\n
En general, la teor\u00eda de la arquitectura del siglo XX se ha basado en la primera globalizaci\u00f3n, y no ha logrado a\u00fan incluir en forma consciente estos diversos procesos culturales en la dimensi\u00f3n que plantea la filosof\u00eda contempor\u00e1nea.<\/p>\n\n\n\n
De los muchos textos sobre teor\u00eda de la arquitectura del siglo XX, se puede obtener una conclusi\u00f3n evidente: la Arquitectura Moderna ha sido el gran movimiento del siglo XX y los intentos m\u00e1s consistentes de superarla han sido el Posmodernismo y el Deconstructivismo.<\/p>\n\n\n\n
Hoy existe un cierto eclecticismo conceptual, donde aparecen y desaparecen m\u00faltiples propuestas te\u00f3ricas similares o contrapuestas, que intentan avanzar en esta ausencia de ideas totalizadoras. Pero tambi\u00e9n este momento de dispersi\u00f3n tiene en su esencia el valor de la b\u00fasqueda, ya que implica una gran libertad te\u00f3rica, como pocas veces ha habido en la historia de la humanidad.
Ese eclecticismo sintoniza mejor con la segunda globalizaci\u00f3n mencionada por la filosof\u00eda contempor\u00e1nea: aquella de la pluralidad y la coexistencia de los diferentes. Esto a pesar de que la arquitectura a\u00fan no ha logrado decantar sus propuestas te\u00f3ricas y sintonizar con este momento del pensamiento, lo que se puede dar a trav\u00e9s del estudio de los procesos culturales.<\/p>\n\n\n\n
Es muy interesante la definici\u00f3n que Fernando Savater(2) hace de cultura y civilizaci\u00f3n, porque no los considera t\u00e9rminos contrapuestos, como lo sosten\u00edan muchos pensadores sociales en las \u00faltimas d\u00e9cadas del siglo pasado. Para \u00e9l, civilizaci\u00f3n es una especie de supracultura que recoge lo mejor de las culturas particulares de cada territorio. Esta reflexi\u00f3n solucion\u00f3 la bipolaridad que se daba en la arquitectura surgida desde Europa, con las ideas de tradici\u00f3n y modernidad o con las del Regionalismo Cr\u00edtico de Frampton y tambi\u00e9n, por supuesto, la bipolaridad en las ideas de Modernidad Apropiada de Cristi\u00e1n Fern\u00e1ndez Cox desde Latinoam\u00e9rica: tradici\u00f3n versus modernidad, civilizaci\u00f3n versus cultura, localismos versus universalismos.<\/p>\n\n\n\n
Para Savater, estos son t\u00e9rminos absolutamente imbricados o, dicho de otro modo, civilizaci\u00f3n es sin\u00f3nimo de la cultura de toda la humanidad. La arquitectura, en consecuencia, debe dar cuenta de esta nueva dimensi\u00f3n.<\/p>\n\n\n\n
Muchos textos se han basado en la idea del topos y\/o contexto como soporte de la arquitectura actual. Pero el topos en s\u00ed mismo es est\u00e1tico, lo que lo hace din\u00e1mico y existencial es la cultura. Lo demuestran los casos donde el topos, por s\u00ed solo, no es capaz de constituir el proyecto arquitect\u00f3nico.
La ocupaci\u00f3n del lugar, por ejemplo, est\u00e1 mucho m\u00e1s relacionada con los procesos culturales en la memoria del sujeto que lo ocupa, que con el lugar f\u00edsico en s\u00ed mismo. No es posible construir un proyecto con la sola memoria del lugar (topograf\u00eda, clima, pluviometr\u00eda) y sin un sujeto existente.
Incluso, en Europa, donde se enfatiza esta noci\u00f3n del topos como soporte \u00fanico desde el cual se puede leer la cultura, se pone en entredicho con los enormes fen\u00f3menos de migraci\u00f3n que hoy sufre ese continente. Estos movimientos dan fe de que el topos no siempre servir\u00e1 para comprender todas las aristas de la gran complejidad de la arquitectura contempor\u00e1nea.<\/p>\n\n\n\n
Actualmente, puede haber territorios ocupados por personas que no pertenecen al lugar o que son nuevos en \u00e9l, para quienes es m\u00e1s importante la carga hist\u00f3rica que viaja con ellos y que no los abandonar\u00e1 por d\u00e9cadas. En esos casos, el topos queda relegado a un escenario donde diversas culturas se mueven en una continua relaci\u00f3n de poder.<\/p>\n\n\n\n
De igual modo, ocurre con el gran n\u00famero de desplazados en todo el planeta por las denominadas cat\u00e1strofes humanitarias, producidas por fen\u00f3menos naturales, guerras o enfermedades. Estas personas se mueven a lugares muchas veces sin carga urbana previa: desiertos, monta\u00f1as o campos de refugiados. En esa situaci\u00f3n, \u00bfa qu\u00e9 debe poner atenci\u00f3n un arquitecto? Sin lugar a dudas, esos desplazados ocupar\u00e1n el territorio de acuerdo a su particular visi\u00f3n, distinta a si fuera otro grupo de refugiados. No podr\u00e1n evitarlo, es su conocimiento acumulado y su fortaleza a la hora de subsistir.<\/p>\n\n\n\n
La experiencia de M\u00e9dicos sin Fronteras(3) es sintom\u00e1tica respecto a este problema. Cito dos casos de ocupaci\u00f3n de territorios similares, ambos en desiertos, que demuestran que el topos, en algunos casos, no alcanza en s\u00ed mismo a ser la base del proyecto arquitect\u00f3nico:<\/p>\n\n\n\n
1. DARFUR, SUD\u00c1N: Los refugiados han sido desplazados a territorios des\u00e9rticos y sin la calidad agr\u00edcola que ten\u00edan sus propiedades anteriores. Pero saben moverse y de las organizaciones humanitarias solo requieren agua, alimento, medicina y sombra. Cuando esta \u00faltima constituye la vivienda, es lo que M\u00e9dicos Sin Fronteras (MSF) y el Alto Comisionado de Naciones Unidas para el Refugiado (ACNUR) llaman plastic sheeting, que es un pl\u00e1stico blanco o azul de 4 x 6 metros. La vivienda la construyen los refugiados con madera de zonas cercanas, la consolidan con barro y paja, y pueden vivir ah\u00ed a\u00f1os, con hospital y escuela aportados por pa\u00edses desarrollados. Probablemente, esos campamentos sean el germen de una ciudad.<\/p>\n\n\n\n
2. L\u00cdBANO: Tiene diferencias radicales con Darfur, ya que aqu\u00ed los desplazados ten\u00edan un gran poder adquisitivo y las familias pod\u00edan tener varios autom\u00f3viles. Uno de los principales problemas a que se enfrent\u00f3 MSF fue el estacionamiento y la seguridad que deb\u00eda tener, pues ocupaba tanta o m\u00e1s extensi\u00f3n que el campamento. Obviamente, el plastic sheeting, que constituye la primera \u201ccasa\u201d despu\u00e9s de la tragedia, no lograba cubrir el nivel de vida que ten\u00edan antes de la emergencia y no era suficiente. Se debi\u00f3 entregar una soluci\u00f3n de mayor complejidad, que incluyera a los autom\u00f3viles. Todos ellos volvieron a sus propiedades una vez acabada la cat\u00e1strofe humanitaria, por lo cual el campamento no se constituy\u00f3 en una nueva ciudad.<\/p>\n\n\n\n
Ambos territorios poseen condiciones clim\u00e1ticas similares, no ten\u00edan ocupaci\u00f3n previa y fueron usados por refugiados. La diferencia era el proceso cultural que tra\u00eda cada grupo humano y que requer\u00eda soluciones distintas.<\/p>\n\n\n\n
Se deber\u00eda lograr mayor sensibilidad en la arquitectura y su ense\u00f1anza con los sujetos de distinta cultura que puedan coexistir en la construcci\u00f3n del lugar. Mientras m\u00e1s complejidad tenga un territorio, m\u00e1s procesos culturales simult\u00e1neos ocurrir\u00e1n en un continuo proceso de sincretismos y separaci\u00f3n. Por eso, en los grupos humanos m\u00e1s aislados es m\u00e1s f\u00e1cil leer su proceso cultural a trav\u00e9s de la forma f\u00edsica, aunque no alcancemos a percibir toda su profundidad ancestral, por la distancia que nos separa de ellos.<\/p>\n\n\n\n
En consecuencia, al producir el proyecto arquitect\u00f3nico no se puede hacer \u00e9nfasis solo en el topos, sino tambi\u00e9n estar atentos a la cultura.<\/p>\n\n\n\n
En esta segunda globalizaci\u00f3n, la arquitectura tiene un importante rol en la resignificaci\u00f3n de las prioridades del planeta. Entre estas \u00faltimas, se encuentran: derecho a vivienda digna establecido por Naciones Unidas(4), numerosos desplazados por cat\u00e1strofes humanitarias, utilizaci\u00f3n racional y democr\u00e1tica del territorio, sustentabilidad ambiental en los procesos humanos, grandes fen\u00f3menos migratorios y los dos tercios de la poblaci\u00f3n mundial que a\u00fan no tienen acceso a ning\u00fan producto formal de la arquitectura.(5)<\/p>\n\n\n\n
Estos, entre otros, son los problemas que la arquitectura deber\u00e1 enfrentar y para lo cual no son suficientes los par\u00e1metros de trabajo que los arquitectos construyeron durante el siglo XX, centrados principalmente en el objeto, la forma del edificio y la arquitectura como arte.
Parafraseando al Movimiento Moderno: \u201cLa forma sigue a la funci\u00f3n\u201d. Hoy podr\u00edamos agregar: \u201cLa forma sigue a la cultura\u201d.<\/p>\n\n\n\n
SIGLO XX v\/s SIGLO XXI<\/strong><\/p>\n\n\n\n La arquitectura del siglo XX, se caracteriz\u00f3 por la b\u00fasqueda de posturas te\u00f3ricas que explicaran el proceso mundial de manera un\u00edvoca, es decir, sus procesos te\u00f3ricos siempre eran posibles de ser aplicados en todo el planeta en forma bastante indiscriminada y totalitaria con un discurso \u00fanico. Esta postura coincide, por ejemplo, con la pol\u00edtica del siglo XX, donde socialismo y capitalismo se disputaron la verdad, de forma un\u00edvoca y excluyente. Tal es as\u00ed con el Movimiento Moderno, Posmoderno o Deconstructivista, que son realidades arquitect\u00f3nicas que se pueden usar en cualquier parte del planeta. Puede no ser esa la b\u00fasqueda de sus autores, pero constituye una forma de ver el mundo bastante global, en el sentido primitivo del t\u00e9rmino y con una potente capacidad de irradiar sus ideas.<\/p>\n\n\n\n De hecho, uno de los problemas a los que siempre se enfrentaron las arquitecturas del siglo XX, fue el choque que estas posturas te\u00f3ricas ten\u00edan con otras realidades humanas que no compart\u00edan sus preocupaciones.<\/p>\n\n\n\n En consecuencia, se deber\u00eda pasar de la homogeneidad conceptual que descarta la disidencia, a la pluralidad absoluta y al respeto por la diferencia. Puestas as\u00ed las cosas, quiz\u00e1s m\u00e1s que de Arquitectura Cultural, se deber\u00eda hablar de Arquitecturas Culturales, en plural, todas con diferentes intereses, preocupaciones, tecnolog\u00edas, habitantes y geograf\u00edas.<\/p>\n\n\n\n El aspecto formal es donde los arquitectos podemos hacer las mayores diferencias, en especial porque todas las posturas te\u00f3ricas del siglo XX derivaban en una expresi\u00f3n formal muy reconocible. Ellas alud\u00edan a una teorizaci\u00f3n que necesariamente deb\u00eda concluir en un modo de expresi\u00f3n que identificara de manera f\u00edsica cada postura y que pudiese darle cuerpo, existencia f\u00edsica y poder a un discurso ideol\u00f3gico.<\/p>\n\n\n\n El resultado final fue que las expresiones formales terminaron con un mayor poder de irradiaci\u00f3n y peso que las propias posiciones te\u00f3ricas, pues la forma es posible de ser reproducida en cualquier lugar, sin juicio previo y sin que necesariamente sea consecuencia de un discurso te\u00f3rico. Esto ocurri\u00f3 en diversos pa\u00edses de todos los continentes, donde la imitaci\u00f3n formal de los procesos que ocurr\u00edan en las \u00e1reas llamadas del primer mundo constituyeron, incluso, un sistema de ascenso social o una est\u00e9tica aspiracional que, a trav\u00e9s de la reproducci\u00f3n de modelos, pretend\u00eda aparecer como lugar desarrollado. La arquitectura del siglo XXI se puede distanciar radicalmente de las propuestas formales homog\u00e9neas. De hecho, la Arquitectura Cultural es imposible de reconocer por lo f\u00edsico, todas las expresiones de esta postura son diversas, de acuerdo al lugar donde se desarrolla y al grupo humano al que va dirigida. Solo pueden ser reconocidas por la relaci\u00f3n dial\u00f3gica entre sujeto, historia y topos. Pero esto es imposible de comprender \u00fanicamente desde lo visual. La Arquitectura Cultural plantea un cuestionamiento de las formas de producci\u00f3n del proyecto, por la necesidad de obtener una arquitectura m\u00e1s cercana a un proceso de representaci\u00f3n social que a la repetici\u00f3n de c\u00f3digos formales. En otras palabras, debe estar m\u00e1s cercana a un proceso vital que visual, a un proceso que incluya lo \u00e9tico, m\u00e1s que lo puramente est\u00e9tico.<\/p>\n\n\n\n Este cambio deber\u00eda producirse en varias dimensiones. Dos de ellas son: las t\u00e9cnicas surgidas desde la sociolog\u00eda o la antropolog\u00eda y los sistemas de creaci\u00f3n desde el arte contempor\u00e1neo.<\/p>\n\n\n\n Tradicionalmente, el arquitecto ha tenido el monopolio del dise\u00f1o de la ciudad, que se ha conferido por leyes sociales que regulan el sistema de creaci\u00f3n y centran esta acci\u00f3n en su figura.<\/p>\n\n\n\n Esto no necesariamente debe cambiar, pero s\u00ed se deber\u00eda modificar la forma de enfrentar el proyecto. El arquitecto deber\u00eda transformarse m\u00e1s en articulador social o activista cultural, que cree sistemas para incluir de manera m\u00e1s decisiva en el proyecto la participaci\u00f3n del sujeto que ocupar\u00e1 esos proyectos. Entonces, deber\u00eda superar la mera creaci\u00f3n de formas, que por alguna m\u00e1gica raz\u00f3n resuelven los problemas sociales. Cuesti\u00f3n que en los resultados de la arquitectura del siglo XX queda demostrado que no necesariamente es as\u00ed. Es m\u00e1s, en muchas ocasiones la arquitectura es productora de conflictos sociales m\u00e1s que de soluciones, lo cual ocurre especialmente en pa\u00edses con menor desarrollo econ\u00f3mico y donde el margen para esta tradicional manera de actuar del arquitecto, como creador y artista, es mucho menor.<\/p>\n\n\n\n Se podr\u00eda intentar una mayor participaci\u00f3n de los diversos sujetos en la acci\u00f3n proyectual con sistemas de an\u00e1lisis ya probados en su eficacia, como las t\u00e9cnicas etnogr\u00e1ficas y proyectos posibilistas(6), m\u00e1s que de proyectos conclusos. Esto quiere decir sistemas de creaci\u00f3n abiertos, capaces de responder y ser flexibles a diversos problemas sociales. Con esto, el resultado formal se hace menos preciso, al considerar que la arquitectura es no solo un problema de forma f\u00edsica, sino tambi\u00e9n de forma social.<\/p>\n\n\n\n Al incluir m\u00e1s radicalmente al sujeto, se considera a los procesos culturales de los cuales \u00e9l es portador y \u00fanico depositario. La cultura son los sujetos en movimiento y, en la medida que se puedan comprender sus preocupaciones, se estar\u00e1n tocando las fibras m\u00e1s \u00edntimas de la cultura.<\/p>\n\n\n\n En estos sujetos tambi\u00e9n est\u00e1 el arquitecto como expresi\u00f3n del proceso cultural y, por lo tanto, en la medida en que m\u00e1s se abra el proyecto y m\u00e1s profesionales participen de \u00e9l, se evitar\u00e1 el autoritarismo desp\u00f3tico de la creaci\u00f3n herm\u00e9tica y end\u00f3gena del arquitecto. Este \u00faltimo podr\u00e1 ser incluido como sujeto que posee un cierto conocimiento \u00fatil para materializar la cultura. As\u00ed, se tendr\u00e1 m\u00e1s posibilidades de acercarse a respuestas certeras a la hora de hacer una arquitectura de la cultura, aunque los objetos sean menos perfectos que en los c\u00e1nones establecidos en el siglo XX.<\/p>\n\n\n\n Los sistemas de creaci\u00f3n planteados desde el arte, como los procesos abiertos, citados por Joseph Beuys(7) al decir \u201ccada hombre, un artista\u201d, al apelar a la autodeterminaci\u00f3n pol\u00edtica y art\u00edstica, y al concebir el arte como el sistema de evoluci\u00f3n humana, son elementos de los cuales puede aprender el proceso de producci\u00f3n arquitect\u00f3nico. Dentro de esos m\u00e9todos, tambi\u00e9n se pueden citar las ideas de John Cage(8), cuando habla de sistemas de azar -similares a los que plantea Duchamp-, o la imperfecci\u00f3n o los ejercicios indeterminados, inconclusos y abiertos, para la inclusi\u00f3n del sujeto como parte de la creaci\u00f3n. En la Arquitectura Cultural es posible considerar la imperfecci\u00f3n como parte del sistema de creaci\u00f3n y la inclusi\u00f3n de sujetos como parte del azar, as\u00ed muchas veces no se sabr\u00e1 en qu\u00e9 terminar\u00e1 un proyecto, s\u00f3lo se podr\u00e1 presuponer un conjunto de reglas que oriente el proceso con final indeterminado.<\/p>\n\n\n\n Hablar del abandono de las l\u00f3gicas de composici\u00f3n, por proyectos posibilistas y abiertos, y de la inclusi\u00f3n del sujeto como almac\u00e9n cultural, no quiere decir abandonar la arquitectura como arte, sino m\u00e1s bien ponerla en un camino intermedio entre arte y sociolog\u00eda.<\/p>\n\n\n\n Actualmente, la arquitectura ha tenido un enorme desarrollo de soluciones y variantes formales para el proyecto: algoritmos, teor\u00eda de fractales, teor\u00eda del caos, procesos matem\u00e1ticos y apoyo de nuevas tecnolog\u00edas. El conflicto es no haber tenido la misma capacidad para desarrollar la posibilidad de enunciar los problemas sociales, no haber creado o sabido utilizar sistemas para su an\u00e1lisis y descubrimiento. Esto \u00faltimo ni siquiera es materia de estudio sistem\u00e1tico en la gran mayor\u00eda de las escuelas de arquitectura del mundo. La composici\u00f3n, la est\u00e9tica, el objeto y la idea del arquitecto como artista siguen siendo los modos de ense\u00f1anza. Por lo tanto, es una disciplina absolutamente coja.<\/p>\n\n\n\n Resulta evidente la necesidad de poner a la altura ambos procesos y buscar una proximidad al mundo de la sociolog\u00eda o antropolog\u00eda, donde s\u00ed han desarrollado sistemas de comprensi\u00f3n de la realidad.<\/p>\n\n\n\n Este cambio requiere comprender el oficio como una disciplina de servicio social, no s\u00f3lo como un arte, donde el compromiso con el desarrollo c\u00edvico es voluntario. Este cambio es radical a la hora de enfrentar un proyecto y la ense\u00f1anza, pues plantea la arquitectura como un sistema de resoluci\u00f3n de problemas ciudadanos, no solo de forma f\u00edsica, sino m\u00e1s bien social.<\/p>\n\n\n\n Esto puede servir enormemente a la arquitectura, pues saca el problema de la mera forma, para llevarla al plano de las significaciones, de la cual obviamente la forma es solo el producto final y libera tambi\u00e9n a los arquitectos de la reproducci\u00f3n formal como sin\u00f3nimo de cultura. El siguiente problema que se enfrenta es c\u00f3mo averiguar ese \u201csentido de la vida\u201d en la pr\u00e1ctica vivida por sus actores, un tema sustancial para la arquitectura y muy dif\u00edcil de resolver al producir un proyecto. Pero ah\u00ed las ciencias sociales llevan camino adelantado y pueden ser de gran utilidad. Esta postura arquitect\u00f3nica refleja lo que en filosof\u00eda se llama segunda globalizaci\u00f3n(9) y, en pol\u00edtica, movimientos altermundialistas. Estos \u00faltimos son grupos heterog\u00e9neos que tienen como ra\u00edz com\u00fan el respeto por las diferencias. Por lo tanto, son un freno a un mundo imperial homog\u00e9neo, sin pretender eliminarlo, sino buscando la coexistencia, cuesti\u00f3n novedosa para la actitud ideol\u00f3gica del siglo XX, donde en pol\u00edtica las posturas conceptuales pretend\u00edan imponerse unas a otras en la polaridad capitalismo-socialismo.<\/p>\n\n\n\n La democracia como valor de participaci\u00f3n es un elemento posible de usar a la hora de producir un proyecto, porque tambi\u00e9n tiene consigo el germen de la autodeterminaci\u00f3n y, por lo tanto, buscar t\u00e9cnicas que la hagan posible en la arquitectura es una necesidad del tiempo que vivimos. Las personas tienen opini\u00f3n respecto de la ciudad y sus viviendas, que son absolutamente necesarias de valorar y considerar en los proyectos de arquitectura. La posibilidad de entregar m\u00e1s roles al oficio del arquitecto o potenciar ciertas capacidades que han sido relegadas en las \u00faltimas d\u00e9cadas, puede ser una tarea urgente y necesaria para concebir otros caminos para la arquitectura. PROPUESTAS<\/strong><\/p>\n\n\n\n A partir de estas ideas, propondr\u00eda un taller de arquitectura con solo dos preguntas:<\/p>\n\n\n\n Los alumnos deben salir a la ciudad y al territorio a buscar problemas sociales, sin tema previo y sin encargo.<\/p>\n\n\n\n Estos problemas deben ser posibles de resolver dentro de la disciplina de la arquitectura, en el m\u00e1s amplio sentido del concepto.Luego, un m\u00e9todo de trabajo con un solo criterio: la producci\u00f3n del proyecto es un acto de creaci\u00f3n colectivo, donde las ideas son patrimonio del total del grupo y pueden ser utilizadas por cualquiera, como un l\u00e1piz, un papel o una mesa. Lo importante es c\u00f3mo se desarrollan esas ideas y se transforman en una soluci\u00f3n a un problema social.<\/p>\n\n\n\n Arquitecto, U. de Chile. MA Teor\u00eda y Proyecto, U. de Catalu\u00f1a, Espa\u00f1a. Premio \u201cArquitecto Joven\u201d Colegio Arquitectos de Chile 1994. Acad\u00e9mico de la U. de Chile y de la U. de Sassari, Italia. Reside en Copenhague, donde es profesor visitante de la Royal Danish Academy y desarrolla trabajos en Chile, Espa\u00f1a, Dinamarca e Italia. Actualmente, trabaja en el proyecto acad\u00e9mico internacional Housing and Culture.<\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":" La evoluci\u00f3n de la ense\u00f1anza de la arquitectura se vincula con la teor\u00eda arquitect\u00f3nica y la necesidad de actualizaci\u00f3n. Analicemos su relevancia actual.<\/p>\n","protected":false},"author":2,"featured_media":0,"comment_status":"open","ping_status":"open","sticky":false,"template":"","format":"standard","meta":{"footnotes":""},"categories":[6],"tags":[],"yoast_head":"\n1. DE LA HOMOGENEIDAD CONCEPTUAL A LA DI\u00c1SPORA TE\u00d3RICA<\/h4>\n\n\n\n
2. DE HOMOGENEIDAD FORMAL A HETEROGENEIDAD DE IM\u00c1GENES<\/h4>\n\n\n\n
Ah\u00ed las arquitecturas del siglo XX se atraparon a s\u00ed mismas, pues ese fen\u00f3meno que ellas posibilitaron fue tambi\u00e9n su ocaso. De aqu\u00ed surgieron muchas de las cr\u00edticas que intentaron superar estos modelos de desarrollo por imitaci\u00f3n, para pasar a la b\u00fasqueda de modelos propios que se acercaran en mayor medida a los problemas y preocupaciones espec\u00edficas de cada lugar.<\/p>\n\n\n\n
Es decir, la Arquitectura Cultural se escapa a todos los preceptos del pasado siglo. Estos se reemplazan por la heterogeneidad formal, la pluralidad conceptual y, finalmente, la imposibilidad de ser aplicada en forma un\u00edvoca en todo el planeta. En cada lugar ser\u00eda necesaria una propia reflexi\u00f3n, lo que en t\u00e9rminos ecol\u00f3gicos o medioambientales constituye la valoraci\u00f3n de la diversidad o biodiversidad.<\/p>\n\n\n\n3. CAMBIOS EN PROCESOS DE PRODUCCI\u00d3N DEL PROYECTO<\/h4>\n\n\n\n
4. SISTEMA INCLUSIVO DEL SUJETO Y EL ARQUITECTO COMO SUJETO CULTURAL<\/h4>\n\n\n\n
5. CREACI\u00d3N COMO ACTO COLECTIVO<\/h4>\n\n\n\n
Un sistema abierto hace que el autor, arquitecto, no controle todo el proceso. Esto produce mucho temor en el creador, pues \u00e9l mismo se autoconfiere ciertas capacidades superiores de comprensi\u00f3n de la realidad que no son posibles de compartir con los ciudadanos comunes. Esta actitud muchas veces obedece m\u00e1s al mantenimiento del estatus social del arquitecto, que a una b\u00fasqueda de contribuir en la soluci\u00f3n de los problemas sociales. Este temor tiene que ver tambi\u00e9n con la autoimpuesta necesidad de hacer un objeto de arte. Obviamente, el control del dise\u00f1o del objeto tiende a buscar una perfecci\u00f3n inexistente. Se supone que al abrir el sistema se tendr\u00e1n menos posibilidades de llegar a esa ut\u00f3pica perfecci\u00f3n, por lo tanto, el arquitecto vuelve a su rutina privada y herm\u00e9tica de creaci\u00f3n.<\/p>\n\n\n\n6. REACERCAMIENTO A LA SOCIOLOG\u00cdA<\/h4>\n\n\n\n
Lo importante es comprender la cultura como producci\u00f3n de sentidos de la vida cotidiana. Si se quiere conocer la cultura de un grupo determinado, en realidad se est\u00e1 preguntando qu\u00e9 sentido tiene la vida para ese grupo.<\/p>\n\n\n\n
Cada grupo humano tiene un significado para cada cosa del hacer y el quehacer, de manera que ellos tienen solo las connotaciones que ese grupo humano particular les da, pudiendo ser parecidos a los de otro grupo, pero nunca iguales en su completa totalidad. La cultura de cada grupo humano es como su huella digital y no existen dos de ellos que tengan la misma.<\/p>\n\n\n\n7. ARQUITECTURA Y POL\u00cdTICA<\/h4>\n\n\n\n
Es necesario modificar el proceso de producci\u00f3n del proyecto, incluyendo otras variables que posibiliten una relaci\u00f3n m\u00e1s adecuada entre el producto final de la arquitectura y sus ocupantes. La democracia como valor de participaci\u00f3n es un elemento posible de usar a la hora de producir un proyecto.<\/p>\n\n\n\n8. M\u00c1S ROLES AL OFICIO DE ARQUITECTO<\/h4>\n\n\n\n
Esto implicar\u00e1 necesariamente un cambio en los sistemas de ense\u00f1anza de la arquitectura, en especial en los pa\u00edses en desarrollo y en aquellos m\u00e1s pobres. En esos lugares sirve de muy poco la ense\u00f1anza tradicional y academicista del arquitecto como dise\u00f1ador de edificios y ligado exclusivamente al arte, pues es muy usual que no dise\u00f1e un solo edificio en toda su vida. Se debe abrir el espectro de ense\u00f1anza a otras din\u00e1micas de comprensi\u00f3n de lo arquitect\u00f3nico y a otras l\u00f3gicas de construcci\u00f3n de las ciudades, donde el arquitecto sea tanto un activista cultural como un artista.<\/p>\n\n\n\n\n